Participar de una acción de Greenpeace no es tarea sencilla. Además de los requisitos y habilidades necesarias (tener experiencia escalando, navegando etc.) para poder realizar las tareas necesarias durante la actividad, implica contar con los conocimientos básicos de los pilares de Greenpeace (por ejemplo la No Violencia) y tener en mente que las acciones pueden ser duraderas e incómodas para la supervivencia.

Este año empezó con una GRAN acción de Greenpeace Internacional que reúne a activistas de todo el mundo, incluyendo a Carlos de Argentina y a Usnea, de Estados Unidos. La actividad implicó que fueran no solo capaces de llegar hasta la plataforma petrolera en medio del océano (al norte de las islas Canarias) sino que , además pudieran permanecer allí durante varios dias viviendo, comiendo y reclamando a la propia empresa desde ese lugar.
Mirá el video de cómo se preparaba Usnea en el barco de Greenpeace (Arctic Sunrise) momentos antes de cumplir su hazaña como activista.
El 31 de enero Usnea y tres activistas de Greenpeace Internacional abordaron el White Marlin en el mar, como parte de una protesta pacífica en contra de la devastación climática generada en todo el mundo por Shell y el resto de la industria de combustibles fósiles, que no se han hecho responsables ni pagado por las pérdidas y daños ocasionados.
Los activistas se acercaron al buque de 51.000 toneladas en tres gomones lanzados desde el Arctic Sunrise y usaron escaleras plegables para llegar a cubierta.
Esta plataforma es una pieza clave de equipamiento que le permitirá a Shell trabajar sobre ocho nuevos pozos en el Pozo Pingüinos de petróleo y gas, en el Mar del Norte.
Ni bien ocuparon la plataforma los activistas Shell anunció las ganancias obtenidas durante el año pasado . La compañía ha obtenido ganancias exorbitantes de elevados precios de la energía, empujados por la guerra entre Rusia y Ucrania. La cifra récord alcanzó casi los 400mil millones de dólares!!
Mirá el mensaje de los activistas
al escuchar las ganancias de Shell
Usnea y los activistas aún permanecen a bordo de la plataforma y siguen reclamando a Shell y enviando mensajes globales con la difusión de esta acción.

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